Gaby Pérez Islas
Tanatóloga
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La separación amorosa es siempre dolorosa pero cuando es impuesta lo es mucho más.

Hay dos grandes grupos:

• Aquellos que te dicen “No te merezco, mejor vete” porque realmente creen que la otra persona va a sufrir a su lado
• Los que te dicen “Te lo digo por tu bien” pero en realidad son ellos los que quieren terminar la relación y se escudan en un noble fin. La sinceridad como en toda relación humana es fundamental.

Caso práctico

Dos chicos se conocen, entablan amistad, una relación. Incluso conocen a las respectivas familias y un día uno de ellos le confiesa al otro que es cero positivo para VIH y le dice “No quiero hacerte daño” Y por ello termina la relación.

¿Quién eres tú para decidir por mí?

• “no quiero que sufras por mi”
• “no quiero que llores cuando me muera, cuando me enferme”

Confunden mucho a la otra parte porque querer es preocuparte y ocuparte del otro.

¿Seremos tan controladores que desde la tumba queremos seguir dejando instrucciones?

• El precio que a veces tiene que pagarse por haber amado es sufrir por su ausencia o por lo que le pase. Pero es un precio que bien vale la pena pagarse cuando se ha amado de verdad.
• La persona lo vale y queremos estar con ella por amor y no por lástima o compasión.

La persona que está enferma se vuelve insegura, se protege a sí misma de sufrir o ser abandonada y por eso quiere ahuyentar a todos los que ama porque así cree blindarse para no sufrir.

La vida al lado de alguien no es una antesala de la muerte, es vida.

• Por complejos que sean los sentimientos la comunicación sigue siendo la llave para llegar a acuerdos y toma de decisiones conjunta.
• NO saquen a las personas de su vida buscando evitarles sufrimiento, mejor denle herramientas emocionales y bellos recuerdos que los apuntalen el día de mañana cuando vengan las tormentas.
• Podemos ponernos guantes de cirujano para no ensuciarnos pero tampoco estaremos sintiendo las caricias, las armaduras no funcionan más que para los combates y la vida no es una guerra es una construcción.

Libros recomendados

• Cómo curar un corazón roto
• Elige no tener miedo
• Viajar por la vida