El estudio Sueños y Aspiraciones de los mexicanos se realizó por LEXIA en 2010, 2017 y en 2022, fue dirigido por Guido Lara Fundador de LEXIA, agencia líder en investigación de mercados y opinión pública. Expertos en comprender lo que las personas quieren, piensan, deciden y hacen. Utilizaron métodos estadísticos y métodos de análisis de psicología social y estudios culturales.
Se realizaron 2,127 entrevistas en toda la República Mexicana, dividida en 6 zonas, con hombres y mujeres de entre 15 y 70 años. Hubo 12 sesiones de grupo con hombres y mujeres de entre 15 y 70 años, de NSEs (nivel socioeconómico) desde A/B hasta E en las diferentes regiones del país.
Se incluyeron diversos perfiles incluyendo: indígenas, campesinos, comerciantes, amas de casa, autoempleados, maestros, policías, pensionados, estudiantes, profesionistas, empresarios y directivos.
Sueños sencillos y concretos. Hoy los sueños y las aspiraciones de la gran mayoría de los mexicanos son sencillos y concretos. Ejemplo: Invitar a la familia a comer en algún lugar rico / Invitar a amigos a la casa a convivir / Tener una pantalla grande para ver películas o partidos de fútbol / Visitar un lugar cercano y descubrir sus paisajes y su cultura.
Las personas están lejos de México como una abstracción, están cerca de las y los mexicanos con rostro, con historias y aspiraciones personales. Sueños no para México sino para mi familia. Los sueños no se dirigen al país en su conjunto, se dirigen a sacar adelante a sus familias.
Es mayoritario el orgullo por ser mexicanos, se valora especialmente la forma de ser, las tradiciones, la comida, las fiestas, el patrimonio natural y cultural. Esta identificación positiva con elementos esenciales de la identidad produce un marco positivo. Aunque si tuviéramos que vivir en otro país: Estados Unidos sería el lugar preferido.
Si pudieran irse a vivir a otro país, el 69% de los mexicanos elegirían no hacerlo y quedarse en México.
La creación de un marco de convivencia que permita florecer los sueños de realización de cada uno. Los casos heroicos son la comprobación de que se tiene que ir contra corriente, de que hay mucho que cambiar.
Ejemplo: Los casos de éxito en el deporte (equipo de nado sincronizado), en la cultura (Alondra de la Parra), en los medios que se debe exclusivamente al esfuerzo personal y se sale adelante contra viento y marea, lo que demuestran es que nuestro sistema no pone las condiciones para que triunfen más personas.
La fe de los mexicanos es muy poderosa y no está situada en el exterior (en Dios, en un gobierno, en factores externos), está situada en el esfuerzo personal para salir adelante.
Uno de los principales problemas que tenemos como sociedad es el elevado nivel de desconfianza entre todos. Se habla mucho de que solo a la familia es en quien se puede confiar (y no siempre). La desconfianza generalizada no es una tierra fértil para generar consensos, acuerdos y actuar en consecuencia.
No trabajamos en equipo, disminuye la percepción de que los mexicanos tenemos un sueño en común, se debilita la cohesión social.
Todo movimiento que contribuya a disminuir la desigualdad y que sea reconocido como un avance en los derechos de las personas que han sido marginadas o excluidas genera aprobación y una sensación de mejoría (mujeres, indígenas, trabajadoras del hogar, adultos mayores, trabajadores en general, discapacitados, comunidad LGTB+). Estos avances no son de un gobierno en particular, el crédito es de todos
Un verdadero país moderno tiene que aspirar a una mayor igualdad entre los segmentos de su sociedad.
Para dejar de hablar de ustedes y ellos y buscar una ampliación del nosotros se necesita reinstaurar la confianza y el respeto, lo cual solo será posible sobre la base de una mayor igualdad entre todos.
Fuente: Guido Lara. Fundador y CEO de LEXIA Insights & Solutions.
TW: @guidolara