El mundo católico tiene un nuevo líder y se enfrentará a un gran reto que le dejó el Papa Francisco.
El jueves 8 de mayo del 2025 salió humo blanco desde la chimenea de la Capilla Sixtina, señal de que los cardenales reunidos para elegir a un nuevo Papa ya habían tomado una decisión en el tercer día de votaciones.
¿Qué significa el humo blanco en la chimenea?
Es la señal para explicar que los cardenales han elegido a un nuevo Papa y esto se utiliza desde el siglo XIX. Es una señal para todos los que están afuera de la Capilla Sixtina. Este humo se crea por la quema de las papeletas con los nombres del cardenal que ha sido votado, además de algunos químicos para dar ese peculiar tono.
Si lo que se vislumbra es el humo blanco, es un indicador de que los cardenales han llegado a un consenso y ya han elegido un nuevo Papa como fue en este momento.
¿Qué sigue después del humo blanco?
Las papeletas debe llevar las palabras latinas Eligo in Summum Pontificem (Elijo al Sumo Pontífice) escritas en la mitad superior, mientras que la mitad inferior se deja para el nombre de la persona elegida.
Si, al final del recuento de los votos, los tres cardenales escrutadores comprueban que uno de los electores ha obtenido al menos dos tercios, la elección del Papa es canónicamente válida.
El Cardenal Decano, o el primero de los Cardenales por orden y antigüedad, pide el consentimiento de la persona elegida de nuevo con una fórmula latina Acceptasne electionem de te canonice factam in Summum Pontificem? (¿Aceptas la elección como Sumo Pontífice?) y a una respuesta afirmativa, añade: Quo nomine vis vocari? (¿Cómo quieres ser llamado?), pregunta a la que el elegido responde con el nombre pontificio.
Y después «Habemus Papam»
A continuación, el primero de los Cardenales Diáconos, el Protodiácono -para este Cónclave el Cardenal Dominique Mamberti- será el encargado, según el n.74 del Ordo Rituum Conclavis, de anunciar desde la Logia del Aula de la Bendición de la Basílica Vaticana, la elección y el nombre del nuevo Pontífice, quien, inmediatamente después, impartirá la Bendición Urbi et Orbi.
«El texto latino del llamado Habemus papam -asegura Piras- se inspira en parte en el capítulo 2 del Evangelio de Lucas, que relata las palabras del Ángel que anuncia a los pastores el nacimiento del Mesías.
La adopción de esta fórmula es ciertamente anterior a 1484, año en que es seguro que se utilizó para la elección de Giovanni Battista Cybo, que tomó el nombre de Inocencio VIII».
Aquí pueden ver lo que está pasando en Ciudad de Vaticano para presentar al nuevo Papa.