La glucosa: ¿Por qué somos adictos al azúcar?

Jessie Inchauspé presenta “La revolución de la glucosa” donde habla sobre el papel esencial que tiene y por qué somos adictos al azúcar.

marzo 17, 2023

Jessie Inchauspé presenta “La revolución de la glucosa” donde habla sobre el papel esencial que tiene y por qué somos adictos al azúcar.

90% de las personas sufren de exceso de glucosa y no lo saben (Fuente: Jessie Inchauspé), un estudio reciente ha demostrado que solo un 12% de los norteamericanos está metabólicamente sano.

En este libro, “La revolución de la Glucosa” (Glucose Revolution) da 10 consejos para mejorar todos los aspectos de la salud, desde el peso, sueño, antojos, estado de ánimo, energía hasta el envejecimiento de la piel.

¿POR QUÉ SOMOS ADICTOS AL AZÚCAR?

Jessie dice que nosotros mismos nos creamos la adicción al azúcar, al no saber consumir adecuadamente la glucosa, pero ¿qué es la glucosa?.

La glucosa, o azúcar en la sangre, es una molécula diminuta que tiene un gran impacto en nuestra salud, entra en nuestro torrente sanguíneo a través de los alimentos ricos en almidón o dulces que comemos.

Las células, como todas las células animales y vegetales, necesitan energía para mantenerse vivas, y la glucosa es su fuente de energía prioritaria, dentro de la familia de los carbohidratos (que incluye el almidón, la fibra, la glucosa, la fructosa y la sacarosa), hay un subgrupo de moléculas más pequeñas: la glucosa, la fructosa y la sacarosa. Este subgrupo se llama azúcares.

Las fuentes de azúcar han ido cambiando con el tiempo (actualmente extraemos sacarosa del Betabel y del maíz), pero independientemente de la planta que se utilice, la sacarosa obtenida que se añade a la comida procesada es la copia química de la sacarosa que se encuentra en la fruta, la única diferencia es la concentración.

Hemos pasado de comer fruta de temporada en la era prehistórica y cantidades minúsculas de sacarosa en el siglo XIX, a comer, en la actualidad, más de cuarenta y dos kilos de azúcar al año.

Seguimos comiendo cada vez más azúcar porque a nuestro cerebro le cuesta refrenar las ansias de ingerir productos que saben como la fruta, lo dulce y la dopamina nos proporcionan una sensación de recompensa eterna.

SÍNTOMAS DEL EXCESO DE GLUCOSA EN EL CUERPO

Así como muchas cosas que consumimos en exceso, algunas cosas delatan que tenemos exceso de glucosa en el cuerpo, entre ellas se encuentran:

Antojos
Fatiga
Infertilidad
Problemas hormonales
Acné
Arrugas
Desarrollo de enfermedades como la diabetes tipo 2
Síndrome de ovario poliquístico
Cáncer
Demencia
Enfermedades del corazón

ENTONCES ¿SOMOS ADICTOS AL AZÚCAR?

Cada que comemos algo dulce, creamos una subida y una bajada de glucosa, la “bajada” de glucosa activa el centro de los antojos en nuestro cerebro y esto nos hace que muy pronto volvamos a querer comer más azúcar y sentir esa “adicción”. Consejos para disminuir el antojo de azúcar:

Nunca comas algo dulce con el estómago vacío vacía.
Antes de comerte el postre o esa porción dulce, toma un vaso de agua con popote, con una cucharadita de vinagre.
Al terminar de comer esto dulce usa tus músculos: muévete un poco, caminar es un buen ejercicio

MARKETING ENGAÑOSO: LO QUE NOS DICEN SOBRE LA COMIDA PROCESADA

“Todo lo que nos metemos en la boca provoca una reacción. Lo que comemos afecta a los treinta billones de células y los treinta billones de bacterias que tenemos dentro”, explica Inchauspé.

Nuestras elecciones nutricionales están influidas por campañas de marketing multimillonarias que tienen el objetivo de enriquecer a la industria alimentaria. Las campañas de refrescos, comida chatarra y dulces, normalmente se justifican con el disfraz de “lo que importa es la cantidad que comes; la comida procesada y el azúcar no son malos en sí”. Científicamente se está demostrando lo contrario: las comidas procesadas y el azúcar son perjudiciales para nosotros, incluso si su ingesta no representa un exceso calórico.

¿CUÁLES SON LAS RAZONES POR LAS QUE ES PERJUDICIAL TENER PICOS DE GLUCOSA?

La finalidad biológica principal de la glucosa cuando entra en una célula es convertirse en energía. Las centrales eléctricas responsables de este proceso son orgánulos microscópicos que se encuentran en la mayoría de nuestras células y se llaman mitocondrias.

Utilizando glucosa (y el oxígeno del aire que respiramos), crean una versión química de la electricidad que proporciona la energía necesaria a cada célula para que pueda funcionar. Cuando la glucosa nos “inunda” las células, se dirige directamente a las mitocondrias para someterse a la “transformación”.

Para sobrevivir, es fundamental que nos deshagamos del exceso de glucosa lo más rápido posiblepara reducir la formación de radicales libres y la glicación, una de las funciones principales del páncreas es enviar una hormona llamada insulina al cuerpo.

La única finalidad de la insulina es acumular el exceso de glucosa en los almacenes que hay por el cuerpo, para mantenerla fuera de circulación y protegernos de sus daños, sin insulina, la gente se moriría; las personas incapaces de generarla (aquellas que padecen diabetes tipo 1, se tienen que inyectar insulina para compensar lo que el páncreas no puede producir.

¿CÓMO APLANAR TUS CURVAS DE GLUCOSA?

Dos comidas con los mismos alimentos (y, por tanto, los mismos nutrientes y las mismas calorías) pueden tener impactos considerablemente diferentes en nuestro cuerpo dependiendo de cómo se ingieran.

De acuerdo a un artículo científico de la Universidad Cornell de 2015, si comes los elementos de una comida que contengan almidón, fibra, azúcar, proteína y grasa en un orden específico, reduces el pico de glucosa general un 73 %, y el pico de insulina un 48 %

¿Cuál es el orden correcto? La fibra primero, la proteína y la grasa después, y los almidones y los azúcares lo último (fruta), según los investigadores, el efecto de esta secuencia es comparable a los efectos de los medicamentos para la diabetes que se recetan para disminuir los picos de glucosa.

Desayunar salado te ayudará a dominar el hambre, a hacer desaparecer los antojos, a tener un shot de energía y a agudizar la claridad mental.

Ingerir grasa antes de una comida rica en hidratos de carbono disminuye la cantidad de insulina que se produce como respuesta a esa comida.

Comer carbohidratos sin acompañamiento no solo es malo para nuestros niveles de glucosa, sino que también confunde a nuestras hormonas del hambre y pasamos de sentirnos llenos a sentirnos hambrientos de nuevo muy rápidamente.

SOBRE JESSIE INCHAUSPÉ

Jessie vive entre California y Francia, es licenciada en Matemáticas por el King’s College, en Londres, y tiene un máster en Bioquímica por la Universidad de Georgetown.

Fue investigadora de Estadística en la Universidad de Pennsylvania, también trabajó en “23andMe” una start-up de análisis genético en Silicon Valley en el área de recolección de datos que le hizo darse cuenta del poder de los hábitos alimentarios. Jessie estudia el efecto de la comida en la salud.

Fuente: Jessie Inchauspé, Nació en Francia. Investigadora en la Ciencia de la Glucosa, bioquímica, autora del bestseller “La Revolución de la Glucosa”. Fundadora de Glucose Goddess, un movimiento que ayuda a las personas a reconectarse con sus cuerpos
IG: @GlucoseGoddess // Web: www.jessieinchauspe.com // TW: @glucosegoddesss